Un increíble viaje desde Venecia a las islas vecinas de Murano y Burano.
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Nuestro crucero hizo una parada en Venecia, donde pasamos una noche. Después de una larga caminata por Venecia, y debido a la Copa Mundial 2018, por la noche, nos quedamos en el barco para ver el partido. Ya había visitado Venecia antes, así que esto me ayudó a saber a dónde ir y qué ver en poco tiempo. (Mira aquí el video de Venecia del 2010)
Desde el crucero, teníamos que llegar al «People Mover» desde el área del puerto o si llegas en automóvil, el área del estacionamiento, hasta Piazzale Roma, donde encontrarás varias estaciones de vaporetto. El People Mover es un tren elevado, corto y rápido, súper fácil de usar y puedes comprar el boleto ahí mismo.
A la mañana siguiente, hicimos un recorrido para ver Murano y Burano, a solo unos minutos de Venecia. Hicimos una excursión desde el crucero para hacer esto para poder llegar a tiempo al barco, pero puedes tomar un vaporetto (un autobús acuático) desde la Plaza de San Marcos para llegar a ambas islas. Me gusta tomar el vaporetto porque es más barato que un taxi, no es tan turístico como las góndolas y todavía te lleva a tu punto.
Murano es famosa en todo el mundo por su tradición en la fabricación de vidrio, una práctica que comenzó en el siglo XIII cuando trasladaron los hornos desde Venecia para evitar incendios en la ciudad. Hoy en día puedes visitar talleres donde los maestros vidrieros hacen demostraciones en vivo, ¡y es impresionante ver cómo convierten arena y fuego en arte! No te pierdas el video al final de esta publicación con una demostración del arte Murano.
Burano, por otro lado, es conocida por sus casitas de colores vibrantes, pintadas así para que los pescadores pudieran verlas desde el mar incluso en días de niebla. ¡A mi me enamoró el lugar! Caminar por sus callecitas es como entrar en un cuadro lleno de vida, donde cada casa tiene un tono distinto que le da a la isla un encanto único.
La isla también es famosa por su tradición en el encaje artesanal, un arte que ha pasado de generación en generación desde hace siglos. Si tienes la oportunidad, puedes visitar la Casa Museo del Encaje para conocer más sobre esta tradición.
Y, por supuesto, no puedes irte sin probar sus dulces típicos como los bussolai o los essi, que acompañados con un cafecito hacen la parada perfecta entre tantas fotos.
Aquí está el video sobre este increíble viaje en esta región italiana: Véneto. Música por Trevor Hinson.
