En un viaje explorando un poco el área conocida como Panhandle de Florida, si conduces por la I10 (la autopista que va desde Jacksonville (FL) hacia Santa Monica (CA), justo después que pasas Tallahassee, vas a encontrar Falling Waters State Park. Es la cascada más alta del estado y se encuentra en un agradable parque que es perfecto para descansar especialmente de un viaje largo en auto. Pero… ¿vale la pena visitar Falling Waters State Park? Aquí te contamos un poco de nuestra experiencia.
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Recuerda que Florida es un estado que no cuenta con montañas, así que obviamente no es una cascada ‘normal’ que podamos ver en otros lugares, así que al visitar no esperes un Salto Ángel o Iguazú :).
¿En Dónde se Encuentra?
Falling Waters State Park se encuentra en el noroeste de Florida, cerca de la pequeña ciudad de Chipley, a unas 25 millas (40km) al sur de la frontera con Alabama. Si viajas desde Tallahassee, el parque está aproximadamente a 1 hora y 45 minutos en auto (100 millas) hacia el oeste. Si visitas desde el sur del estado, Miami está a 600 millas del parque (unos 965.6km), lo que implica un viaje más largo, de 9 horas aproximadamente en auto. Puedes hacer como hicimos durante nuestro viaje en auto desde Orlando hacia Destin, nos detuvimos en Wakulla Springs a pasar la noche y luego seguimos a Falling Waters.
Sobre el Parque
Este parque tiene la cascada más alta de Florida, con una caída de 73 pies en una cueva subterránea. Aunque la cascada puede variar en fuerza según la temporada, sigue siendo un punto único en el estado. En el estado hay muchos ‘sink holes’ o un hundimiento en la tierra, y esa es la razón por la que este lugar existe. Es decir, no es una cascada que cae desde una montaña, si no que el agua cae a ese sink hole y no se sabe a donde llega el agua.
El parque está abierto todos los días del año, normalmente abre a las 8am hasta el atardecer. La entrada en auto es de $5 y la dirección exacta es: 1130 State Park Road, Chipley FL 32428.
¿Qué otra actividad podemos disfrutar ahí?
Además de la cascada, Falling Waters State Park ofrece una variedad de actividades al aire libre, como:
- Senderismo: Hay varios senderos que serpentean por el parque, llevándote a través de frondosos bosques y hasta la cascada.
- Camping: El parque tiene áreas para acampar equipadas con agua, electricidad y baños modernos. Es perfecto para una escapada de fin de semana en la naturaleza.
- Picnic: Las áreas designadas para hacer picnic están equipadas con mesas y parrillas, perfectas para un día en familia.
- Natación: Hay un lago artificial en el parque donde puedes refrescarte durante los días más calurosos.
Esta puedes ser una excelente opción si estás en un viaje en auto y quieres descansar un poco, estirar las piernas o hasta pasar una noche acampando. Eso si, te recomiendo reservar con anticipación su espació para acampar.
A pesar de que no pude disfrutar de la cascada en su máxima expresión, visitar Falling Waters State Park es una buena opción para los amantes de la naturaleza. Con su historia fascinante, senderos encantadores, y la oportunidad de disfrutar de la paz y tranquilidad del noroeste de Florida, es un parque que merece ser visitado. Claro que quedé con ganas de ver la cascada con más agua, no se porque me esperaba algo más llamativo, pero de igual forma creo que es una buena opción para quienes están buscando explorar más allá de las playas y los parques temáticos en Florida.
A continuación un video sobre este lugar al norte de Florida:
